«Y el Señor entregó en sus manos a Joachim rey de Judá, y apartó los utensilios de la casa de Dios; y los trajo a tierra de Sinair, a la casa de su dios, y colocó los utensilios en la casa del tesoro de su dios.» (Daniel 1:2).

En el año 605 A.C. Dios permite que el rey de Babilonia Nabucodonosor invada la ciudad de Jerusalén (Dan. 1:1). Dios permite que el rey de Judá Joachim sea capturado, además también permite que objetos sagrados del templo de Dios, sean robados y utilizados para la idolatría de Nabucodonosor. Así mismo, Dios permite que varios Israelitas sean prisioneros y llevados a Babilonia. (Dan. 1:2-5). Dios hasta ahora ha permitido cosas, que para la mente humana son ilógicas e impermitibles. ¿Por qué, cómo puede Dios permitir que su ciudad amada sea invadida, que el rey de una de las tribus de su pueblo sea entregado al enemigo, y que su pueblo sea secuestrado?

Así como paso en Jerusalén, que Dios permitió que el enemigo hiciera todas esas cosas malas en contra de su pueblo; así pasa en nuestras vidas, Dios permite que heridas nos hagan sufrir!… Pero es aquí cuando nos preguntamos ¿Cómo un Dios que me ha dicho 👉 Jeremias 31:3 «(…)Con amor eterno te he amado…» permite que cosas así pasen en mi vida? Las respuestas al porque Dios lo permite, tal vez nunca la sepamos, debemos ser conscientes que vivimos en un mundo caído por el pecado y que las decepciones y sufrimientos hacen parte de nuestro vivir diario!… Pero debemos descansar en la promesa que no hay nada en este mundo, que no esté bajo el control del Dios Soberano!…

A pesar que algunas veces no entendamos los planes de Dios, porque sabemos que sus pensamientos no son nuestros pensamientos (Isa. 55:8-9) podemos ir con humildad y a través de la oración ferviente, pedirle discernimiento no para entender el porqué de las cosas, sino para comprender el por qué lo permitió. Dios nos dice. Romanos 8:28 «(…)los que aman a Dios, todas las cosas le ayudan a bien…» Como hijos que amamos a nuestro Padre Celestial, debemos entender esta gran verdad, todo absolutamente todo ayuda para bien! Malo o Bueno ayuda para bien, debemos ver «las cosas malas» que Dios permite, como cosas buenas disfrazadas (1 Cor. 2:14).

Pero ¿Cómo ver «las cosas malas» como cosas buenas disfrazadas? Pues, el secreto está en que sea la situación que sea, confiemos en que Dios nos sacará con bien de ella!… Miren cuando Ananías, Misael y Azarías se oponen a postrarse y adorar al dios de Nabucodonosor (Dan. 3:13-14) sabían que las cosas no iban a parar nada bien, pero confiaron en Dios, cuando estos tres hombres se enteran que van a ser quemados en un horno, ellos sabían perfectamente que esa noticia pues no era nada agradable, pero ellos confiaron en Dios (Dan. 3: 16-17) y ¿Qué beneficios tuvieron estos tres hombres al confiar en Dios en momentos malos de su vida? Pues Daniel 3:25 «Y el Rey dijo: «Yo veo cuatro jóvenes sueltos, que se pasean en medio del fuego y sin que sufran daño alguno…».
Estos tres hombres confiaron en Dios y Dios no permitió que ellos perecieran, ellos no sufrieron daño alguno, salieron intactos de un horno que estaba 7 veces más caliente de lo normal (Dan. 3:19) pero Dios hizo un milagro en ellos y ellos salieron beneficiados de todo esto.

Por ello, no siempre vamos a salir intactos y sin dolor de las situaciones que permita Dios en nuestra vida, pero si confiamos en él y en su perfecta voluntad, ese sufrimiento, ese dolor, esa herida, todo eso será para nuestro bien, porque es Él quien nos dice 1Pedro 5:10 «Y después que ustedes hayan sufrido un poco de tiempo, Dios mismo, el Dios de toda gracia que los llamó a su gloria eterna en Cristo, los restaurará y los hará fuertes, firmes y estables!…» 👍💞🙏😊🌼🌟💫