Vivimos en una รฉpoca de grandes avances cientรญficos y tecnolรณgicos: la radio, el telรฉfono, la televisiรณn, los aviones, etc. Todos estos avances que ha realizado el hombre los ha tenido que realizar respetando ciertas leyes que estรกn inscritas en la naturaleza y por ello, alcanzaron el รฉxito.
El hombre, cuando respeta la naturaleza propia del ser humano, alcanza la felicidad y la plenitud. Cuando va en contra de su naturaleza, cae en el vacรญo. Su vida pierde sentido, como le sucede, por ejemplo, a una persona adicta a las drogas.
Pero, la pregunta es: ยฟcon respecto a quรฉ? ยฟCuรกl es la norma o el criterio para saber si algo es bueno o malo?
La respuesta es elย bien moral, que regula y mide los actos humanos en orden a su fin รบltimo. El bien moral es lo que mejora a toda la persona y no solo a una de sus partes, por ello es diferente alย valorย que sรณlo mejora alguna parte de la persona. Es el bien que estรก por encima de todos los demรกs bienes.
Elย โbien moral”ย es el que le da valor a todos los actos del hombre.
La ley moral nos guรญa para conseguir el bien moral que abarca a todo el hombre, que hace que รฉste actรบe de acuerdo a su dignidad y sea un reflejo de la bondad de Dios.
Existen diferentes tipos de leyes: La Ley eterna, la Ley natural, la Ley Revelada y las Leyes Civiles en nuestra vida.
- La ley Moral: Es una llamada divina a participar en la misma vida de Dios, un mandato que Dios da para indicar el camino que se debe seguir para alcanzar la vida eterna. Es una orientaciรณn para la propia libertad.La ley moral con principios generales y normas particulares, es percibida por la conciencia, aparece en la Sagrada Escritura o por medio de los hombres.
- La Ley Eterna: Cuando Dios creรณ el universo, le dio unas leyes concretas que garantizaban su perfecto funcionamiento y para que se cumpla su propio fin. Por eso, Santo Tomรกs define la ley divina comoโel plan de la divina sabidurรญa que dirige todas las acciones y movimientos de las criaturas en orden del bien comรบn de todo el universoโ.Todo lo creado ha sido orientado hacia el hombre, que es el รบnico ser libre que convive con todo lo creado, a pesar de ser criatura tambiรฉn. Al hombre, que por su libertad es el รบnico ser que rompe la ley eterna, Dios le ha dado una ley de comportamiento, misma que se encuentra grabada en su corazรณn: la ley moral natural.
La ley moral es eterna porque es anterior a la creaciรณn; es ley porque es una ordenaciรณn normativa que hace la inteligencia divina para el recto ser y obrar de todo lo que existe.
Es inmutable y es universal porque es para siempre y abarca a todos los seres creados segรบn su naturaleza. - La Ley Natural: La ley natural es la ley eterna en lo que se refiere al hombre. Ley para orientar su libertad hacia su realizaciรณn perfecta como seres espirituales. Se llama natural porque se refiere a la misma naturaleza del hombre. Es un designio amoroso de Dios.Existen ciertas leyes y normas que rigen el Universo. Son leyes que no han sido fabricadas por el hombre, sino que estรกn inscritas en la naturaleza. Son tan โnaturalesโ como la ley de gravedad, por medio de la cual sabemos que siempre que soltamos un objeto, รฉste caerรก al suelo. Nosotros, sin necesidad de estudiar nada, sabemos que los objetos se caen, que el agua moja, que el fuego quema.
Gracias a nuestra libertad, podemos elegir baรฑarnos o no baรฑarnos, pero si nos metemos a un chorro de agua, no podemos elegir mojarnos o no mojarnos. ย No podemos evitar que la Tierra se mueva alrededor del sol, ni que cada dรญa dure 24 horas. Estas leyes que rigen el universo son inmutables y universales y no queda mรกs remedio que aceptarlas y adecuar nuestro comportamiento a ellas.
De la misma manera en que hemos descubierto estas leyes que rigen el Universo sin que nadie tuviera que explicarnos el por quรฉ son asรญ, tambiรฉn podemos descubrir dentro de nosotros otras leyes que estรกn ya inscritas dentro de nuestra naturaleza de hombre, compuesto de alma y cuerpo.
Pensemos en nuestro cuerpo: si no comemos, nos da hambre; si no dormimos, sentimos sueรฑo; si hacemos ejercicio nos da sed. Respiramos y nuestros pulmones purifican la sangre que el corazรณn bombea a todo nuestro cuerpo sin que podamos hacer nada para impedirlo. Son leyes que no podemos cambiar sin poner en serio peligro nuestra vida.
En nuestra alma tambiรฉn encontramos una ley que nosotros no hemos escrito y que tampoco podemos cambiar sin hacernos daรฑo. Esta ley nos dicta hacer siempre el bien y evitar el mal. La conocemos desde siempre. Nadie nos la tuvo que decir o explicar pues ya estaba dentro de nosotros.
Esta Ley natural tambiรฉn es universal e inmutable, como la ley de la gravedad, es decir, es aplicable a todos los hombres y no cambia con el paso del tiempo.
Dentro de esta Ley natural estรกn todos los preceptos universalmente vรกlidos, como elโno matarรกsโ, โrespeta a los otros y a sus bienesโ, โdefiende la verdadโ, โlucha por la justiciaโ,ย etc.
Toda ley estรก enfocada a buscar un bien, y asรญ como la ley de la gravedad conserva el equilibrio en el universo, asรญ tambiรฉn la Ley moral natural estรก encaminada a que todo lo que hay dentro de nosotros funcione correctamente y no se rompa el equilibrio planeado por Dios desde el principio.
La Ley Divina Revelada: Parece increรญble, pero Dios sabรญa que no era suficiente el habernos dado la luz de nuestra conciencia y la ley natural.
Dios sabรญa que el hombre, al hacer uso de su libertad, iba a intentar violar aรบn estas leyes universales e inmutables, con el riesgo de hacerse un daรฑo irreparable.
Por esto, รl mismo se comunica con el hombre y le transmite โinstructivosโ exactos y precisos que debe respetar para llegar a su fin รบltimo, a encontrar el โtesoro escondidoโ que es la felicidad plena y eterna junto a รl.
Este instructivo lo conocemos con el nombre deย Ley Divina Reveladaย y estรก plasmado en la Sagrada Escritura. Dentro de ella estรกn los Diez Mandamientos, el Mandamiento de Amor, las Bienaventuranzas y todas las normas de comportamiento que nos dio Jesucristo con su ejemplo y sus palabras.
Si leemos el Evangelio, encontraremos en รฉl cientos de consejos que te da Jesucristo:
Aprended de mรญ que soy manso y humilde de corazรณn.
Al que te pida el manto, dale tambiรฉn la tรบnica.
Ama a tus enemigos y ora por los que te persiguen.
Todos estos consejos son “pistasโ que Dios nos da para que realmente encontremos nuestro tesoro y no nos quedemos perdidos a la mitad del camino!… (Por: Catholic.net | Fuente: Catholic.net) ๐๐๐โช๐ฆ๐๐๐ฆ๐๐๐ผ